¿Cómo arreglar un disco abultado en el cuello?
¿Cómo arreglar un disco abultado en el cuello? Si esa es la pregunta que se hace en su mente, está en el lugar adecuado. ¿Sabía que uno de cada cuatro adultos sufre dolor de cuello? Y, de esa población, casi el setenta por ciento experimenta dolor crónico.
Si usted es una de las personas desafortunadas que sufre una protuberancia discal en el cuello, probablemente esté buscando formas de encontrar alivio. Antes de considerar la cirugía, hay algunas cosas que puede probar en casa para ayudar a aliviar el dolor. Siga leyendo para conocer los detalles.
¿Son los discos abultados lo mismo que las hernias discales?
No, los discos abultados y las hernias discales no son lo mismo. La protuberancia discal es una afección en la que el propio disco es empujado hacia fuera del canal espinal, pero la capa exterior del disco permanece intacta.
Una hernia discal, por el contrario, se produce cuando la capa externa del disco se rompe, permitiendo que el contenido interno se escape. Los discos abultados pueden tratarse a menudo sin cirugía, pero las hernias discales suelen requerir una intervención quirúrgica.
Síntomas de la protuberancia discal en el cuello
Hay muchos síntomas potenciales de una protuberancia discal en el cuello. El síntoma más común es el dolor de cuello, que puede ir de leve a grave. Otros síntomas potenciales son:
– dolores de cabeza
– dolor que se irradia hacia los hombros o los brazos
– entumecimiento u hormigueo en los brazos o las piernas
– debilidad muscular
Si el disco abultado ejerce presión sobre la médula espinal o los nervios, también puede causar problemas como:
– dificultad para caminar
– pérdida de equilibrio
– incontinencia intestinal o vesical
Si tiene alguno de estos síntomas, es importante que acuda a un médico para que pueda confirmar el diagnóstico y elaborar un plan de tratamiento.
Diagnóstico de la protuberancia discal en el cuello
Hay varias formas de diagnosticar una protuberancia discal en el cuello. El método más común es a través de una resonancia magnética, que puede mostrar los discos de la columna vertebral y cualquier anomalía.
Otros métodos de diagnóstico son el TAC, las radiografías y las mielografías. Las protuberancias discales suelen diagnosticarse cuando las personas tienen dolor u otros síntomas que sugieren un problema en la columna vertebral.
Tratamiento de las protuberancias discales en el cuello
Hay varias formas de arreglar un disco abultado en el cuello y la espalda. Algunos de los métodos más comunes son:
La cirugía:
Normalmente sólo se recomienda si el disco está causando un dolor intenso u otros problemas.
Terapia física:
Un fisioterapeuta puede ayudar a fortalecer los músculos que rodean el disco, lo que puede ayudar a evitar que se abombe.
Atención quiropráctica:
Un quiropráctico puede ayudar a realinear la columna vertebral, lo que puede ayudar a aliviar la presión del disco.
Masaje:
El masaje puede ayudar a aliviar la tensión de los músculos que rodean el disco, lo que puede ayudar a evitar que se abulte.
Acupuntura:
Esta antigua práctica china puede ayudar a aliviar el dolor y promover la curación.
Si tiene una protuberancia discal, es importante que acuda a un médico para que pueda determinar el mejor tratamiento para usted. En la mayoría de los casos, la afección puede tratarse sin cirugía. Sin embargo, si el dolor es intenso o no responde a otros tratamientos, puede ser necesaria la cirugía.
Consejos para prevenir las protuberancias discales en el cuello
Hay algunas cosas que puede hacer para ayudar a prevenir los discos abultados en el cuello. En primer lugar, es importante mantener una buena postura.
Esto significa sentarse recto y mantener los hombros hacia atrás. En segundo lugar, debe evitar las actividades que supongan una tensión innecesaria para el cuello, como levantar objetos pesados o mirar el teléfono durante mucho tiempo. Por último, debes hacer ejercicio regularmente para mantener tus músculos fuertes y sanos.
Si sufre una protuberancia discal en el cuello, hay muchas opciones de tratamiento disponibles.
Asegúrese de hablar con su médico para que pueda elaborar un plan adecuado para usted. Además, siga estos consejos para evitar futuros problemas.
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Algunos de los tratamientos que ofrecemos son:
– Fisioterapia
– Atención quiropráctica
– Terapia de masaje
– Acupuntura
– Programas de ejercicio y rehabilitación
Adaptamos nuestros planes de tratamiento a cada paciente, para que pueda estar seguro de que está recibiendo la mejor atención posible. Si está listo para iniciar su camino hacia la recuperación, póngase en contacto con nosotros hoy mismo para programar una consulta.
Preguntas frecuentes
¿Son permanentes las protuberancias discales en el cuello?
La respuesta a esta pregunta no es sencilla. Mientras que algunas protuberancias discales pueden acabar curándose por sí solas, otras pueden requerir un tratamiento continuo o una intervención quirúrgica.
En algunos casos, una protuberancia discal en el cuello puede ser permanente y causar dolor y molestias a largo plazo.
Si experimenta los síntomas de una protuberancia discal, es importante que acuda a un médico para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento.
¿Cómo se arregla un disco abultado en el cuello y la espalda?
Existen múltiples formas de tratar una protuberancia discal en el cuello. Las opciones de tratamiento incluyen:
Terapia física:
Esto puede ayudar a aliviar el dolor y mejorar la función.
Ejercicio:
Esto puede ayudar a fortalecer los músculos alrededor de la columna vertebral y mejorar la amplitud de movimiento.
Pérdida de peso:
Esto puede ayudar a reducir la cantidad de presión sobre los discos del cuello.
La cirugía:
Se trata de una opción para las personas que padecen un fuerte dolor de disco abultado u otros problemas que no responden a otros tratamientos.
A veces, los antiinflamatorios no esteroideos también son útiles para aliviar el dolor de la hernia de disco cervical.
¿Cómo se arregla el abultamiento del cuello?
Hay algunas cosas que puedes hacer para arreglar el abultamiento del cuello. El tratamiento conservador es lo primero aquí.
En primer lugar, intenta llevar un collarín más alto para ayudar a sujetar la zona. En segundo lugar, puedes utilizar una toalla o pañuelo enrollado para ayudar a apuntalar la zona y aliviar parte de la presión.
En tercer lugar, puedes probar ejercicios que ayuden a fortalecer los músculos del cuello y los hombros. Por último, puedes acudir a un médico o quiropráctico para que te ayude con la alineación y el apoyo.
¿Qué es una hernia discal?
Una protuberancia o hernia discal es una afección en la que un disco de la columna cervical se rompe o desgarra. Cuando se produce una hernia discal, la persona puede sentir dolor, entumecimiento y debilidad en la zona afectada.
La degeneración de la columna vertebral y la hernia de disco lumbar también pueden provocar una hernia de disco. La raíz del nervio espinal también puede estar comprimida, lo que puede causar dolor adicional y otros síntomas.
¿Qué causa una hernia discal?
Hay varias cosas que pueden causar que un disco se hernie, incluyendo:
-Aging
-Las lesiones
-Movimientos repetitivos
-Levantar algo pesado
¿Cuáles son los síntomas de una hernia discal?
Los síntomas pueden variar en función de la localización del disco. Los síntomas más comunes son:
-Dolor en el cuello, la espalda o las piernas
-Entumecimiento u hormigueo en brazos o piernas
-Debilidad en las extremidades afectadas
¿Cuáles son los síntomas de una hernia discal?
Los síntomas de una hernia discal varían en función de la ubicación del disco. Los síntomas más comunes son:
-Dolor en el cuello, la espalda o las piernas
-Entumecimiento u hormigueo en brazos o piernas
-Debilidad en las extremidades afectadas
¿Cómo se diagnostica una hernia discal?
Una hernia discal suele diagnosticarse mediante una exploración física y pruebas de imagen, como una resonancia magnética. El médico también puede solicitar pruebas nerviosas o una tomografía computarizada para confirmar el diagnóstico.